Cuando Jimin se queda dormido baja a la sala, ahí estaba Namjoon haciendo una llamada, se notaba preocupado, tenía ojeras en el rostro y se notaba agotado.

Si Jungkook hubiera pensado que todo esto iba a pasar había escapado desde un principio con Jimin muy lejos de aquí, lo hubiera llevado a esas ciudades donde nadie se conoce, son pequeñas y lindas, la tranquilidad se instala y todo es paz.

Cuando deja de hablar por teléfono se acerca y se sienta enfrente de él, suspira y habla.

—Tengo que decirte algo pero prométeme que no le dirás nada a Jimin, no quiero que se preocupe —le dice, ambas miradas se topan.

—Escúpelo.

—Es sobre Taehyung —Namjoon pone más atención y quiere decirle algo pero él no le deja—. Deja que primero hable yo, después me dices lo que quieras. Tae está en problemas por mi culpa, mis padres le han amenazado porque quieren que me separe de Jimin, si no logran lo que quieren pueden hacernos daño a alguno de los tres. Yo no quiero que pase nada, Taehyung es como un hermano para mi y Jimin, él es el amor de mi vida.

El alfa dice con pequeñas lágrimas formándose en las esquinas de sus ojos. Namjoon le mira sin mucho que decir, su mente se cicla y quiere hablar rápido, soltar algo, lo que sea.

—Tengo que hacer algo para salvarlos a ambos, mis padres tienen contactos con gente peligrosa que tal vez ya están con él o no lo sé, pensar en ello hace que me ponga más nervioso —admite eso sin darse cuenta—. No puedo hablarle a la policía porque mis padres seguramente se han adelantado con comprarlos, mierda.

Y Namjoon le mira de nuevo sin siquiera mover una pestaña, quiere ayudar a Jimin y a Taehyung, pero sinceramente... ¿qué puede hacer él?

—Y-Yo... quiero ayudar p-pero a la vez no sé cómo Jungkook —admite con la voz temblorosa a causa del miedo.

—Puedo hablar con algunos conocidos o a alguien de la familia que me ayude en esto... —mira a la esquina de la mesa y una luz se prende en su cabeza—. Puedo hablar con Jongsuk.

—¿Tu hermano? ¿Crees que pueda ayudar?

—No lo sé, nunca nos hemos llevado bien pero en estos meses que no le he visto pueda que cambie algo.

Mierda, las personas no cambian de un día para otro, ¿o si?

—Trataré de contactarlo, tal vez Jin sabe más de él, a mi parecer están viviendo juntos —termina Jungkook.

Namjoon asiente y antes de hablar Jungkook lo interrumpe.

—Si algo le llega a pasar a Jimin por mi culpa, acaba conmigo por favor, y si me llega a pasar algo a mi, cuídalo mucho y protégelo, tú más que nadie lo conoce realmente, tal vez yo no sepa aún todo lo que le gusta o le llama la atención pero tú sabes todos sus miedos, son casi hermanos —su labio tiembla y lo muerde para no hacerlo notar, eso no pasa desapercibido por el otro alfa.

Wow un alfa pura sangre llorando, eso nunca había sido visto por sus ojos.

✧✦✧

Jimin despierta luego de estar acostado toda la tarde, su cuerpo está algo entumecido por la rara posición en la que durmió. Trata de pararse y un leve mareo lo agarra desprevenido, opta en quedarse en la cama mejor. Mira alrededor y ve todo tranquilo, las cortinas ni siquiera fueron abiertas en todo el día, podía ver un poco y afuera estaba oscuro.

Piensa en hablarle a Jungkook para que suba y le dé mimitos o se duchen juntos, su pancita gruñe algo fuerte que se asusta, parece como si no hubiera comido en siglos.

Duda en levantarse nuevamente, pero aún así, hace el intento.

Con ayuda del buro se levanta dejando bien los pies en el suelo, lo logra con mucho éxito y se siente tan bien por eso que pedirá una pizza entera y se la comerá toda.

Pero, ¿por qué demonios tenía tanta hambre?

Sale de la habitación y ve las luces apagadas del pasillo, se abraza así mismo y llega hasta las escaleras.

—¿Namjoon, qué haces aquí? Es muy tarde, deberías estar en casa descansado.

Ve a su amigo acostado en el mueble con la televisión encendida.

—¿Y mi alfa? —mira hacia el otro lado esperando encontrarlo pero ni siquiera su olor está presente del todo—. ¿Salió por la cena? ¿Namjoon? Hey despierta.

Lo mueve del sofá pero parece como si estuviera desmayado, a lo mejor es el sueño acumulado que tiene, piensa.

Va hacia la cocina no sin antes apagar la televisión. Calienta algo en el microondas, que tal vez es papa con carne y queso o quien sabe, como quiera ira a su pancita.

Lo prueba después de soplar el tenedor donde había una jugosa porción de papa, mira su teléfono al lado de él y piensa en llamar a Jungkook para ver dónde estaba, se siente solo. Namjoon aún no despierta y no tiene con quien hablar.

✧✦✧

Entra por el callejón y mira hacia ambos lados, sus manos metidas en las bolsas de su chaqueta, no hizo aún ninguna llamada porque después del último problema no sería atendido.

Unos hombres detienen su paso, lo analizan de arriba hacia abajo, lo reconocen al instante. Se hacen a un lado pero lo escoltan hacia su destino.

Sube las escaleras que tienen una pinta de no haber sido remodeladas hace un buen tiempo, tan tétrico. Varias puertas maltratadas por donde quiera que mire, pero sabe a cual especialmente entrar, detrás de él los mismos hombres caminan como si él pudiera hacer algo malo allí, si hace cualquier movimiento que parezca sospechoso una bala estará en su cabeza.

Llega a la puerta pero es detenido por los hombros, hace que se quede en su lugar y lo revisan de pies a cabeza, hurgando para encontrar cualquier arma, pero viene limpio.

Hacen una seña de que pase, toca dos veces la puerta y esta no tarda en abrirse. Al igual que afuera hombres estaban a lado de aquel sujeto y por supuesto que había más a su alrededor.

—Jeon Jungkook, bienvenido querido amigo, ¿en qué puedo ayudarte? —pregunta pero continua—. ¡Oh espera! ¿Dónde quedó el "nunca necesitaré de tu ayuda"? Como cambian las cosas.

Rueda los ojos y aprieta la mandíbula.

El que estaba enfrente de él era nada más y nada menos que Jisung, un omega que es dueño de la mafia más peligrosa del país y casi del mundo. ¿Que si tiene historia? Bueno es algo corta, se conocieron en un antro ya hace años y tuvieron algo de contacto meses después el cual no duró mucho ya que no hubo sentimientos de por medio.

—Vengo en son de paz Jisung, solo quería hablar contigo.

¿Por qué iba con él? Muy fácil, su papá no sabía de la existencia de él, bueno tal vez pero no del vínculo que tuvieron.

—Toma asiento —señala la silla frente a él—. Te escucho, sabes que yo haría todo por un viejo amigo —le sonríe con calidez.

Es que al final ellos dos no quedaron para nada mal, solo dejaron de contactarse.

—Estoy aquí porque...

Lo detiene con una señal, le hace otra seña a los hombres que lo cuidaban, ellos lo dudan pero aún así salen como se les ordenó. Jungkook no le haría nada a él de todos modos.

—Prosigue.

—Mis padres quieren meterse conmigo, mi omega y Taehyung, yo sé que te dije que nunca te necesitaría y tú me dijiste que nunca digas nunca pero mis padres me están haciendo una jugada sucia, si esto se sale de control no podré yo solo.

En la cabeza de Jisung solo rueda el "mi omega". Aún así deja el pensamiento de lado y se concentra en lo importante.
Jungkook sigue hablando.

—Iré al grano, necesito a tu gente, mi papá está protegido y yo no.

Jungkook respira agitado por la nariz y aprieta sus puños.

Jisung entrecierra los ojos, le mira desde abajo hacia arriba, se aclara la garganta y solo puede decir:

—Cuenta con mi ayuda.